Por: Roger Rivero
Con el viento a favor es fácil navegar, y más de un cubano windsurfista que ha hecho la travesía del estrecho de la Florida, bien lo pueden atestiguar.
Últimamente, los vientos no están soplando muy a favor de los autos eléctricos. Quizá las “existencias” de los entusiastas de estos autos ha disminuido, y conquistar a las grandes masas está costando mayor esfuerzo, pero lo cierto es que, incluso Tesla, el gigante eléctrico que ha marcado el auge de los vehículos eléctricos en EE. UU., advirtió a los inversores que se encuentra entre “olas de crecimiento”, y que le espera un año más tranquilo en el 2024.
Audi, como otros fabricantes, surca las aguas que eventualmente le conducirán a un futuro totalmente eléctrico, y el nuevo Q8 e-tron, es quizás su esfuerzo más serio hasta el momento.
La denominación de los vehículos eléctricos de Audi ha provocado cierto enredo desde su introducción en el 2009. Llamar simplemente “E-Tron” a su primer SUV eléctrico, no fue una decisión muy adecuada a medida que la familia de eléctricos ha crecido, así que, para su renovación de mitad de ciclo, Audi ha rebautizado su EV original como Audi Q8 E-Tron.
¿Qué hay de nuevo?
El Q8 e-tron del 2024 está destinado a ser el SUV eléctrico insignia de la marca alemana. Audi ha renovado el estilo con una parrilla rediseñada, elementos de iluminación y llantas de diseño actualizado. Ahora la batería es más grande, para aumentar su rango y velocidad máxima de carga para competir mejor con sus rivales. Hay cambios también en la suspensión y dirección.
¿Cómo se ve desde afuera?
Encontramos dos estilos de carrocería, SUV y Sportback. Desde el parabrisas en adelante son idénticos, pero el Sportback tiene una línea de techo curva tipo cupé, mientras que el SUV mantiene una postura más alta, que beneficia el espacio en la parte posterior.
No encontramos un esfuerzo marcado en hacer que el Q8 e-tron llame demasiado la atención, e incluso carece de elementos típicos que otros fabricantes utilizan para distinguir o poner de relieve que se trata de un modelo eléctrico. El estilo, si bien elegante y atractivo, no tiene elementos atípicos, dando como resultado un diseño fluido que se me antoja una mezcla entre la ranchera Allroad y los SUV de la serie Q.
¿Y por dentro?
En el interior, el Q8 e-tron Prestige refleja la posición del modelo como SUV eléctrico insignia de Audi. La instrumentación digital se combina con dos pantallas de infoentretenimiento, que ofrecen una apariencia de alta tecnología en un diseño tradicional.
El salpicadero es pronunciado y atractivo, sin ser excesivamente lujoso ni excesivo. Las molduras de madera auténtica de poro abierto, el cuero de primera calidad, los detalles de metal pulido, y la elegante iluminación, hacen del habitáculo un lugar placentero. Los asientos son excelentes y en el acabado Prestige incluyen masaje. Hay buen espacio para acomodarse, y el espacio de carga es muy generoso.
Mi único reclamo de este interior podría limitarse a la consola central. Es poco funcional, y el espacio reservado para carga es abierto, algo raro en un auto de este lujo y precio.
Tecnología y seguridad
El panel central de doble pantalla incluye una pantalla táctil principal de 10,1 pulgadas en la parte superior, y otra de 8,6 pulgadas en la parte inferior, además del vistoso cuadro de instrumentos completamente digital, Virtual Cockpit.
En la práctica, el sistema de infoentretenimiento es rápido y, en general, intuitivo. Por momentos requiere de demasiada atención, sobre todo cuando nos instalamos en el auto, y nos obliga a responder dos o tres preguntas antes de conectarnos con Android Auto.
Algunos controles, como el de los refuerzos de los asientos, están un poco escondidos en el sistema, y es que aquí también notamos la escasez casi crónica de controles físicos más sencillos y directos.
Audi incorpora de serie un conjunto de tecnologías de asistencia a la conducción en el Q8 e-tron, y están disponibles con control de crucero adaptativo y asistente de aparcamiento automático.
Probamos el primero, y si bien hizo su trabajo, creo que dista de los sistemas que encontramos en algunos competidores, incluso de menos lujo. Lo sentí “nervioso” en las curvas y emitió sobradas falsas alarmas.
¿Cómo se conduce?
Tengo la impresión de que la aproximación de Audi, con el Q8 e-tron, es muy parecida a la de Lexus con su RZ 450e. No despistar demasiado a un posible comprador que haga la transición por primera vez parece ser la intención, presentando un eléctrico que no se diferencia en mucho estéticamente, pero que, al conducirlo, tampoco sea demasiado notable la divergencia.
En la publicación especializada Motortrend comentaban que “no hay una aceleración contundente, ni tecnología futurista, ni ayudas a la conducción que sitúen al Q8 E-Tron por encima de sus competidores”.
Como he afirmado, creo que lo han hecho por diseño, pero, aun así, Audi mejora otros aspectos del Q8 e-tron para 2024. Los modos de conducción ahora tienen diferencias más marcadas, han revisado la dirección y modificado la suspensión, aumentado la rigidez torsional y añadido una suspensión neumática adaptativa de serie, que se puede subir o bajar manualmente.
El Q8 E-Tron tiene motores en las ruedas delanteras y traseras, que proporcionan una potencia combinada de 402 caballos y son capaces de acelerar hasta las 60 millas o 100 kilómetros en 5,5 segundos. La autonomía se ha incrementado en más de un 30% respecto al año pasado, hasta las 300 millas o 480 kilómetros para el Sportback y 285 millas o 458 kilómetros para el SUV.
Me llamó la atención que en una estación de carga rápida donde logre cargar la batería al 100%, mi 2024 Audi Q8 E-Tron de prueba solo reportó 218 millas, sustancialmente menos de las 285 que supuestamente debería notificar.
Nuevamente, pase por el fastidio de no poder cargar en una estación de Shell Recharge. Solo dos cargadores de 4 estaban trabajando, y luego de un par de errores, el cargador se quedó atado al Audi, requiriendo que remotamente reiniciar la maquinaria para poder desconectarlo.
Como siempre hago, a quienes se interesen en adquirir un auto eléctrico les recomiendo instalar un cargador de Nivel 2 en casa, para evitar las penurias de una infraestructura mediocre. De esta forma podría cargar este Audi durante la noche, pues en 13 horas la batería estaría lista.
¿Si quiero uno, por cuál me decido?
En su clase de vehículos eléctricos de lujo, Audi se coloca en la escala alta, pues el precio de entrada del 2024 Q8 e-tron Premium es de $74,400, subiendo a los $77,800 para el modelo Sportback. Estos son los precios de entrada. Subiendo en la escala, si se le antoja un Prestige o un Q8 e-tron S Line Prestige, prepare $84,800 o $88,200 respectivamente.
¿Contra quién compite?
También de Alemania llegan competidores como el Mercedes Benz EQB o el BMW iX. Podríamos agregar a la lista el Geneis GV60, Tesla Model X o Rivian R1S.
Concluyendo
El Audi Q8 e-tron 2024 no es el más rápido, ni el más grande, ni el más lujoso, ni el mejor de su clase, pero no deja de tener sus atractivos, sobre todo para aquellos que sientan apego a la marca. Quizá se muestre seductor para los actuales dueños de Audi, que se sientan tentados por la propulsión eléctrica, y encontrarán aquí un modelo que mezcla de buena manera lo convencional con toques futuristas.
Roger Rivero es un periodista independiente, miembro de NAHJ, la Asociación nacional de periodistas Hispanos y de NWAPA, la Asociación de periodistas automovilísticos del noroeste. Los vehículos son proporcionados por los fabricantes como préstamo por una semana para fines de la reseña. De ninguna manera, los fabricantes controlan el contenido de los comentarios.